Cada tarde, cuando le ponemos el cuerpo a la Casita, el
desorden puede ser un obstáculo para poder atender de la mejor manera a
las consultante. Asimismo, para las mujeres que vienen a la Casita, influye
si el ambiente en donde las atendemos esta ordenado, limpio, con linda energía.
¡Todo suma! Por eso, la propuesta de ordenar y guardar cada cosa con
etiquetas y en un lugar adecuado era buena para todas. Para nosotras, para las
mujeres, para la Casita.
Sin embargo, era difícil pedirle un esfuerzo más a cada
caopitera porque ya sabemos que están todas haciendo mucho esfuerzo (¡valga la
redundancia!) por nuestra querida Casa del Encuentro. Por eso la jornada de limpieza era solo
para la que pudiera, sabiendo que iba a implicar muchiiiiiiiiiisimo si alguna podía
venir.
Pero, una vez más, ¡las compañeras dijeron "presente"!
La jornada fue un EXITO! Fue una tarea ardua y durante toda el día hubo risas y buena onda.
Fue emocionante encontrarse con tanta historia… con tanto
camino recorrido de nuestra querida Casita. Donaciones recibidas, talleres
realizados, fichas de atenciones, noticias de diarios, etc. Etc. Revisamos cada
papel antes de tirarlo: ver si era útil y, si no lo era (hubo que romper antes
de tirar para evitar que haya datos de la casa circulando por ahí). Lo que
quedaba en la casita se ordenó, pusimos etiquetas en cada caja, en cada mueble,
en cada cajón. Intentamos unificar “zonas”, para que las cosas estén ubicadas
en lugares cómodos conforme el uso que se les daba…. ¡¡¡Fue un trabajo con mucha
dedicación!!!!!
La
Casa esta hermosa, revolucionada, con cambios y novedades que nos
movilizaron a todas pero ¡¡¡con el corazón latiendo más fuerte que nunca!!!
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